La eliminación de toda la humanidad siempre fue su objetivo número uno... hasta que se encontró con ella.
Aramus no tiene paciencia o simpatía por las excusas que la humanidad utiliza para cazar cyborgs y erradicarlos. Él fue liberado con demasiadas cosas en sus manos como para no poder perdonar ni olvidar nunca.
Pero todo eso cambia cuando rescata a una frágil doctora humana que se niega a verlo como una máquina. Ella le enseña que tal vez no todas las emociones son una debilidad y que el amor puede hacer más fuerte incluso a un cyborg cínico y gruñon como él.
¿Y para todos aquellos quienes se burlasen de su cambio de opinión o amenazasen a su mujer? Adelante. Sus nudillos de hierro podrían necesitar un poco de ejercicio.
aqui!
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